Nacido el 23 de noviembre de 1922 en Villalba (Lugo).

Se licenció y doctoró en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid, ciudad en la que también cursó estudios de Ciencias Políticas y Económicas. Su trayectoria docente transcurrió en la Cátedra de Derecho Político de la Universidad de Valencia (que ganó en 1948) y la de Teoría del Estado y Derecho Constitucional del campus madrileño (que ocupó desde 1953 hasta 1987).

Su carrera en la Administración franquista le llevó a ser secretario general del Instituto de Cultura Hispánica (1951), secretario general del Ministerio de Educación Nacional (1955) y director del Instituto de Estudios Políticos (1961), además de procurador en Cortes, miembro del Consejo Nacional, del Consejo de Estado y del Consejo de Economía Nacional. En 1962 Franco le nombró ministro de Información y Turismo, cargo que ocupó hasta 1969, en la época álgida de crecimiento del turismo extranjero en España; a él se debe la Ley de Prensa e Imprenta de 1966 que abolió la censura previa. Posteriormente fue nombrado embajador de España en Londres (1973-75), cargo que contribuyó a consolidar su admiración por el conservadurismo británico y por su modelo de monarquía parlamentaria. Tras la muerte de Franco desempeñó un papel importante en la época de la transición a la democracia.

En el primer gobierno de la Monarquía, presidido por Arias Navarro, Fraga ocupó la esencial cartera de Gobernación, que conllevaba una vicepresidencia del Gobierno (1975-76). Tras el fracaso de aquel gabinete, y ante la perspectiva de un proceso democratizador más audaz bajo la dirección de Adolfo Suárez, Fraga fundó en 1976 un nuevo partido, Alianza Popular; situado a la derecha de la Unión de Centro Democrático del presidente Suárez, aglutinó a elementos procedentes del régimen anterior, pero dispuestos a aceptar el sistema democrático. Las elecciones de 1977 le convirtieron en diputado, portavoz parlamentario y miembro de la ponencia que redactó la Constitución de 1978. Desde las elecciones de 1979 buscó mejorar sus resultados electorales formando la Coalición Popular, en la que se unieron con AP el Partido Demócrata Popular y el Partido Liberal. El hundimiento de la UCD permitió que, a partir de las elecciones de 1982, Fraga se convirtiera en líder de la oposición al gobierno socialista de Felipe González. Pero, a pesar del liderazgo carismático indiscutido del que gozaba en su partido, sus resultados electorales no mejoraron en 1986, avalando la tesis de que Fraga impedía a los populares alcanzar una mayoría de gobierno por su pasado franquista y su imagen de hombre autoritario; en consecuencia, cedió la dirección del partido al joven Hernández Mancha en 1986 y renunció al protagonismo en la política nacional, ejerciendo como diputado en el Parlamento Europeo (1987-89). Cuando en 1989 se repitieron los malos resultados electorales, Fraga volvió para presidir la refundación del que se llamaría en lo sucesivo Partido Popular: un proyecto inspirado en la democracia cristiana, a cuyo frente situó a José María Aznar.

Aunque mantuvo un cierto liderazgo moral sobre la derecha española, desde 1990 Fraga se retiró a su Galicia natal, encabezando la acción del partido en aquella región. El 17 de diciembre de 1989 resultó elegido presidente de la Xunta de Galicia, cargo del que tomó posesión el 5 de febrero de 1990. Fue reelegido de forma consecutiva para el mismo en 1993, 1997 y 2001, siempre por mayoría absoluta.

Su extensa obra ensayística y de análisis político supera los 80 títulos.